¿CÓMO SABER SI HAY MOTIVACIÓN CUANDO NUESTROS HIJOS ESTUDIAN?

¿CÓMO SABER SI HAY MOTIVACIÓN CUANDO NUESTROS HIJOS ESTUDIAN?

La motivación está a la orden del día: mensajes positivos, cursos de desarrollo personal… Eso nos indica la importancia que tiene para poder abordar con éxito casi cualquier objetivo que nos propongamos. Por eso es fundamental también en el ámbito académico.

Tenemos que ser conscientes que para que nuestro hijo sea un buen estudiante tienen que darse tres aspectos muy importantes:

  • El primero, la capacidad intelectual. Tranquilos, la mayoría de las personas tenemos una capacidad intelectual suficiente para aprender un nuevo conocimiento.
  • Lo segundo, saber cómo hacerlo. Esto implica una serie de técnicas o destrezas que se pueden aprender y practicar. El conocimiento de estas técnicas permite avanzar académicamente a través de los distintos niveles educativos.
  • El tercero, querer. De nada sirve la capacidad si no tienes motivación suficiente para hacerlo. La motivación es lo que mueve el mundo y es un impulso más importante que la capacidad intelectual. Como padres tenemos que saber que independientemente de que los resultados académicos sean los ideales, la motivación ante el estudio es básica, a  medida que desarrollan habilidades, perciben su progreso y se sienten más capacitados para aprender.

Los niños motivados muestran unos comportamientos que tenemos que observar y nos servirán de indicadores para detectar el grado de implicación en el estudio; en cambio, la carencia de estas conductas nos pueden advertir que tenemos que involucrarnos y emprender estrategias para su compensación.

En los niños motivados e implicados en el aprendizaje se observan los siguientes comportamientos:

1º Hace las tareas diarias sin necesidad de recordárselas y cumple con todos los trabajos.

2º Entrega a tiempo sus trabajos.

3º No quiere faltar al colegio y necesita estar puntual.

4º Es respetuoso con los profesores.

5º Tiene buena actitud antes las actividades del colegio, le gusta participar y que cuenten con él.

6º No es conformista, muestra orgullo y satisfacción por los buenos resultados.

7º Está disponible para las propuestas de sus profesores.

8º Es buen amigo y empatiza con sus compañeros de colegio.

Motivar a nuestros hijos para que mantengan el esfuerzo el tiempo necesario es una tarea ardua, es una acción conjunta entre el colegio y la familia pero es vital poder detectar cuándo el interés de nuestros hijos comienza a flaquear para darle las ayudas necesarias adaptadas a sus carencias.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *