Aprender español es cada vez más común en estudiantes de otros ámbitos lingüísticos, ya sean germánicos, anglosajones u orientales.
Son muchos los que deciden venir a España para estudiar algún año de su carrera universitaria (aunque habría que decir también que algunos no vienen por el idioma sino por el clima y la “fiesta”), otros los que vienen a trabajar. Por eso es muy importante el español para extranjeros.
Se le llama español para extranjeros porque los contenidos y la metodología no tienen nada que ver para alguien hispanoparlante que ya conoce la lengua a la que se enfrenta (y solo tiene que analizarla y ponerla en práctica) con lo que un extranjero necesita para aprender español. De hecho nuestra lengua no es en absoluto fácil, pues posee gran variedad, sobre todo, de formas verbales, y su uso suele ser lo que más problemas provoca en los estudiantes (ya que muchas veces ni nosotros mismos sabemos por qué estamos usando un tiempo verbal y no otro, simplemente lo elegimos porque nos suena mejor). Por lo tanto es difícil explicar lo que en ocasiones ni nosotros comprendemos muy bien.
Las razones que animan a los extranjeros a aprender español, bien sea en su país de origen o en España suelen ser:
- Te puede facilitar la incorporación al mercado laboral.
- Te abre la posibilidad de viajar a más de 20 países, en los que el español es la lengua oficial.
- Te podrás comunicar con más de 500 millones de personas (según cifras del Instituto Cervantes el español es la segunda lengua más hablada del mundo, tras el chino).
- Podrás acceder a millones de libros, canciones y películas en versión original.
Hay que pensar que cuando hablamos de español no nos referimos únicamente al idioma que hablamos en España, sino que sirve también para el ámbito latinoamericano.